Un día se presentó en la ganadería y hízo de ella su nuevo hogar, se comporta con el mismo génio que sus compañeros de cercado, se hace respetar y tiene su sítio adquirido por méritos própios.
Si se lo llegan a decir ni ella misma se lo hubiese creido, jamás se le habría pasado por la cabeza a mi mujer, ponerse tan cerca de las reses brávas, como se puede ver en la foto, hecho "histórico".